domingo, 4 de agosto de 2013

EL DESFILE. UN GIGANTÓDROMO.

Semejante cantidad de gigantes, giganteros, acompañantes y músicos no podrían desfilar más de un día. A lo sumo, en un par de ocasiones concretas: Alrededor del 23 de abril, del Aniversario del Título de Ciudad o de la Reconquista de Alcalá a principios de mayo, en Ferias o en la Semana Cervantina. En todas esas fechas propuestas hace buen tiempo y el turismo está en activo y animado para contemplar semejante espectáculo.
En mi mente, habría un recorrido lineal que recorrería los extremos oriental y occidental del casco histórico, a saber, desde la Puerta de los Mártires (4 Caños) hasta la Puerta de Madrid. A lo largo del eje Libreros-Plaza de Cervantes-Mayor-Plaza de Los Santos Niños-Cardenal Cisneros se concentraría el público en una suerte de Carrera Oficial. Más de un kilómetro de desfile e idóneo para las cámaras de fotos y de televisión en caso de que se llegase a considerar de interés informativo. ¡Lo más sería que TeleMadrid lo retransmitiese!
En este gigantódromo podrían instalarse puntos intermedios de baile: Plazas de Cervantes, Santos Niños y Cebada (Puerta de Madrid) o un gran recinto para las danzas que irían en orden o turnos y donde pudiese concentrar una cantidad grande de espectadores: Huerta del Palacio Arzobispal. En este caso, los períodos de reproducción y cría de cernícalos primilla cigüeña blanca serían lógicos condicionantes.
Podría invitarse, en este evento, a comparsas giganteras del resto de España, lo cual atraería aún más visitantes.
Bueno, esta es mi visión pero está abierta a comentarios y sugerencias. Gracias.

Una propuesta de nuevos gigantes..

Como decía, los tiempos que corren son duros y quien no está en paro está con la soga al cuello. Y como las personas, así están las asociaciones y entidades ciudadanas. Sin un duro así que soy consciente de la gravedad de la situación. Sin embargo, vayan aquí ideas, ilusiones a las que a mí particularmente me apetecería mucho enrolarme y ser un miembro activo.
Además, parece que hay temas por solucionar: que el ayuntamiento encontrara un digno acomodo para la comparsa de Gigantes y Cabezudos o el adecuado mantenimiento de las figuras y sus ropas (que seguro así lo hacen los giganteros), así como restauraciones con buen criterio.
Sin embargo, ¿no os llama la atención que no haya un gigante del Cardenal Cisneros, el mejor alcalde de Alcalá? Como el que fuera fundador de la universidad complutense, más personajes se me antojan olvidados para nuestra querida tradición.
Para acompañar a Cisneros, se me ocurren unos pocos más y veréis que muchos de ellos PODRÍAN ser donaciones o gigantes propiedad de ciertas entidades pero que engrosasen la familia de gigantes alcalaínos en caso de que las respectivas masas sociales o las arcas de cada entidad lo permitieran. Para esta lista me permito la licencia de acordarme de las casas regionales:
1. Cardenal Cisneros. Se me ocurre por aportaciones de entidades culturales o académicas.
2 y 3. Pareja alcalaína con las vestimentas tradicionales. Los estudios publicados por Andrés Huguet en  La indumentaria popular tradicional en Alcalá de Henares en el siglo XIX podrían servir de base para ambos gigantones. Imagino una danza al son de la dulzaina y el tamboril.
4. Manuel Azaña. Para mí un gigante no es una burla a un personaje histórico pero podría no ser del agrado de la familia del que fuera presidente de la República y nacido en la Calle de la Imagen. Quizá por aportaciones de grupos de izquierda política.
5. El Empecinado. Ya sabéis, protagonista de la liberación de la ciudad alcalaína durante la ocupación francesa y de la victoriosa Batalla del Puente del Zulema.
6. Un Macero municipal. El traje de estos representantes del ayuntamiento de la Ciudad me parece precioso y trasladado a un gigante sería espectacular. Símbolo de la condición de Ciudad y de la autonomía municipal. Esta idea ya la ha tenido una persona, que por el respeto y cariño que tengo, no diré su nombre a menos que lo desee.
7 y 8. Un paracaidista y un Húsar de Pavía. Pienso en el estamento militar para su creación. La idea del Húsar la tuvo la misma persona que mencioné líneas arriba.
9 y 10. Jugadores de la RSD Alcalá y del C.D. Avance. Me viene a la cabeza el gigante del Atletic de Bilbao que desfila por la capital vizcaína. Dos clubes con solera. Sus rostros podrían estar basados en sendos clásicos de estos equipos locales. No sé si la masa social, peñas y simpatizantes de estos equipos serían favorables a la idea y si podrían sacarlo adelante.
11. Estudiante de la Universidad de Alcalá con el traje del Siglo de Oro. Quizá por suscripción popular del colectivo estudiantil universitario.
12. Antonio de Nebrija, impresor y gramático. ¿Libreros, impresores?
13. Pedro Gumiel. ¿Arquitectos de la ciudad y de la Comunidad de Madrid?
14 y 15. Lope de Vega y Francisco de Quevedo. Podría ser fruto de colegios e institutos alcalaínos, escritores de la ciudad...
16. Costalero. El colectivo de costaleros de Alcalá es, afortunadamente y esperemos que siga creciendo, numeroso. Yo no sé si considerarían indecoroso un gigante con costal.
17 y 18. Pareja andaluza. Se me ocurre la Casa de Andalucía y simpatizantes. Imagino su turno de baile al son de compases flamencos.
19 y 20. Pareja asturiana. Pienso en la Casa de Asturias para hacer dos gigantones con indumentaria tradicional del Principado y un baile al compás de gaita asturiana.
21 y 22. Pareja gallega. Detrás estaría la Casa de Galicia "Corredor do Henares" y su fantástica banda A Derradeira animaría la danza de estos gigantes.
23 y 24. Pareja aragonesa si así lo quisiese la Casa de Aragón. Una de esas jotas que a todos nos ponen los pelos de punta marcaría el baile de estos gigantes en su turno.
25 y 26. Pareja castellano-leonesa. Se me viene a la mente la Casa de Castilla y León y el Hogar de Soria. Una jota con dulzaina y tamboril acompañaría la danza.
27 y 28. Pareja castellano manchega. Pienso en la Casa de Castilla-La Mancha. Imagino la blusa alcarreña para la figura masculina y la boina de rigor, el pañuelo azulado de cuadros, un tarro de miel. Quizá el numeroso contingente de nuestra vecina provincia podría aportar una BOTARGA a la comparsa de Alcalá. Además, en la Tierra de Alcalá hay una villa que conserva una botarga: Pezuela de las Torres, en plena Alcarria de Alcalá.
29 y 30. Pareja argentina. Creo recordar que hay una casa de Argentina en nuestra ciudad. Imagino un emocionante tango bailado por los dos gigantes.
31 y 32. Pareja rumana. Una bonita aportación del contingente rumano de Alcalá y una bonita forma de estrechar lazos y de integración de culturas.
33 y 34. Pareja china  a cargo de los emprendedores del gigante asiático que hay en Alcalá. Sus músicas y danzas son exóticas y bonitas.
35, 36, 37 y 38 que son los que corrían a cargo de la Asociación de Moros y Cristianos de Alcalá de Henares y que representaban una pareja islámica y otra cristiana, relacionadas con la reconquista del Castillo de Alcalá La Vieja y la donación real de la Villa y sus aldeas y tierras al Arzobispado de Toledo. Su presentación parecía prevista para las Ferias de 2013 pero no tenemos ninguna noticia al respecto y a 20 días exactos del Pregón en el día de San Bartolomé.
39 en adelante: aportaciones de otros colectivos basados en personajes infantiles de televisión, personajes emblemáticos que sean ejemplo para la sociedad, las peñas festivas, las peñas taurinas...
Seguro que olvido muchos y estoy seguro que a esta lista podríais aportar muchos. Desde luego, si esta realidad que vivimos fuera distinta y viviéramos en el Mundo Feliz y de los Sueños, Alcalá se vería con una cantidad impresionante de gigantes que podrían ir acompañados por sus entidades que los vieron nacer, sumados a la comparsa ya existente de la Ciudad de Alcalá de Henares. Con esta comunión CIUDADANÍA-FESTIVIDAD podríamos haber llegado a una etapa clímax en donde la ciudadanía hace la fiesta, la población es agente activo de los festejos y no un mero consumidor pasivo de lo que ofrece la administración municipal. Una festividad sana, divertida, cultural y en la que se habría llegado a una interesante cohesión social. Todas las teselas que componen el mosaico complutense unidas por este escenario imaginario. Alcalá de los Gigantes o La Gigantada de Alcalá. ¿Fiesta de Interés Nacional?

Una declaración de intenciones.

Pese a que admiro a nuestra entrañable comparsa de Gigantes y Cabezudos y a la pasión de las personas que los bailan y los cuidan con mimo, la natural ambición humana siempre me ha hecho echar de menos nuevos motivos ligados a la identidad complutense que podían engrosar la nómina de gigantes y cabezudos.
Así mismo, a medida que he ido profundizando en esta tradición y gracias a la maravillosa herramienta que es internet y youtube he sabido que hay distintos tipos de desfiles, de acompañamientos musicales, de danzas y coreografías y de agrupaciones giganteras dentro de una misma población.
Como hijo de Alcalá de Henares y apasionado de sus cosas, ha sido inevitable que estas ideas las haya trasladado, en mi imaginación, a la milenaria y singularísima urbe complutense. Y digo singularísima porque Alcalá es ese extraño engendro -con todo el cariño- resultado de una ciudad provinciana que ha ido acumulando historia y patrimonio material e inmaterial y de una población con eminentes características de aluvión, desarraigo y con una notable percepción de "ciudad dormitorio" influenciada por una enorme metrópoli que durante años ha ido despojando a Alcalá de buena parte de su identidad e  instituciones seculares. Como resultado, un organismo urbano que como buenamente ha podido, ha metabolizado lo uno y lo otro y ha dado esta curiosa ciudad, única en el aglomerado metropolitano del centro de España. Así, tenemos una ciudad con cientos de asociaciones (vecinales, culturales, deportivas, musicales, teatrales, peñas, casas regionales y nacionales, religiosas...), con una ecléctica Semana Santa que es uno de los mejores ejemplos para conocer en 7 días todas, o casi todas, las modalidades procesionales de España.
La fuerte identidad de la Ciudad que nos acogió a partir de los años 50 del pasado siglo ha conseguido una peculiar metabolización y adaptación de las identidades regionales de los colectivos que en esas décadas inmigraron.
Y esta capacidad de Alcalá para adaptar la pluralidad e incorporarla a sí misma es la que me lleva a pensar con ilusión y seguridad que en materia gigantera, la sociedad alcalaína puede llegar a engrandecer esta tradición, con los aportes de cada colectivo en plazos y recursos económicos que sean posibles -habida cuenta de la crueldad de la crisis y de cómo está afectando a tanta gente y tantas familias-. Quizá estemos a las puertas de la Fiesta de Interés Turístico Nacional o, quién sabe, Internacional que parece estamos tratando de encontrar.